Reseña
Esta bonita novela es de esas que te tocan el corazón, de esas que son "feel-good", porque nos hacen sentir bien y son muy agradables de leer. Una lectura amable que nos habla de un hombre amable.
A través del día a día del librero Carl Kollhoff, quien ha pasado su vida rodeado de libros por su trabajo en una librería, el autor nos cuenta una historia sobre la importancia de los libros y sus autores, y también sobre la amistad y la felicidad. Y además nos habla sobre esas personas que tenemos a nuestro alrededor y que a veces no les hacemos mucho caso.
Carl lleva en su mochila unos libros perfectamente envueltos para entregarlos en mano a sus clientes más conocidos. Les lleva libros y felicidad, y él así lo siente. Esas personas se convierten en personajes de novelas que Carl ha leído y ama. Porque los libros y la literatura también forman parte de la vida. Su rutina se transforma el día en que una niña de nueve años, Shasha, que adora los libros, se cruza en su vida y la trastoca totalmente. Un personaje con una frescura y un desparpajo maravillosos que ponen el contrapunto en la vida de Carl y del resto de personajes.
Me ha encantado el libro, la historia, los personajes... ¡Una delicia de lectura! Esta obra se lee rápido porque no es muy extensa, y seguro que os gustan todos los personajes, no solo los protagonistas. Una preciosa novela de este escritor alemán, y que os recomiendo leer por su historia que seguro os tocará el corazón.